Así se vivió el fuerte terremoto que azotó a Grecia y Turquía

 


Un fuerte terremoto ha sacudido este viernes la costa turca del mar Egeo y ha provocado al menos dos muertos en Grecia y otros 12 en Turquía, donde también hay más de 400 heridos, según ha informado la Agencia para Desastres y Emergencias del Gobierno turco (AFAD). La localidad más afectada ha sido Esmirna, la tercera ciudad de Turquía y uno de sus polos económicos, donde al menos 20 edificios se han derrumbado. Los equipos de salvamento tratan de rescatar a las personas que se han quedado atrapadas en una carrera contra el reloj antes de que la falta de luz dificulte los trabajos. Por el momento, 70 personas han sido rescatadas con vida de debajo de los escombros. 



El sísmo se ha producido a las 14.51 hora local (dos horas menos en la Península) en aguas del mar Egeo, a 17 kilómetros de la costa turca y a una profundidad de casi 12 kilómetros. Aunque en un inicio el Instituto Sismológico Kandilli de Estambul anunció que la magnitud del terremoto era de 6,8, posteriormente la elevó a 6,9. La institución homóloga de Estados Unidos sitúa la magnitud en 7. El temblor principal ha sido seguido de varias fuertes réplicas, algunas incluso de magnitud superior a 5. Los expertos turcos y griegos alertan de que en las próximas semanas podrían producirse nuevos terremotos de gravedad y magnitud superior a 5 y alertan del peligro de regresar a los edificios que hayan podido sufrir daños aunque no sean perceptibles a simple vista.





Las televisiones turcas han mostrado imágenes de varios edificios de varias plantas completamente destruidos y donde los equipos de salvamento trabajaban a toda velocidad para tratar de apartar los cascotes. Serdar Sandal, alcalde de Bayrakli, el distrito de Esmirna donde más edificios han resultado dañados, ha explicado que incluso un inmueble de nueve pisos se ha desplomado, si bien los equipos han logrado rescatar al menos a una mujer con vida e intentan sacar a un niño al que ya han localizado. Las autoridades han pedido a los ciudadanos que se mantengan en el exterior y no regresen a sus hogares si están dañados. La Dirección de Asuntos Religiosos ha anunciado que las mezquitas permanecerán abiertas para acoger a quienes no puedan regresar a sus casas.


  
En el mar, el sísmo ha producido un maremoto y las olas han arrastrado varios veleros en el puerto de Sigacik. “El mar se retiró y regresó con muchísima fuerza al cabo de ocho minutos. Por desgracia, luego nos encontramos que la ola había ahogado a una vecina nuestra, de casi 90 años", ha explicado a la cadena Habertürk el alcalde de esta pequeña localidad turística, Yasa Keles: “Las tiendas, el centro, todo eso se ha destruido. Afortunadamente en las casas de los vecinos no ha habido tantos daños”. El alcalde de la localidad costera de Seferihisar, Ismail Yetiskin, ha explicado que allí también ha entrado el agua y ha inundado varias casas. “No tenemos información de fallecidos pero probablemente los haya”, ha anunciado. También ha dicho que no se ha podido establecer contacto con los pescadores del pueblo que en el momento del terremoto se hallaban faenando en el mar.